jueves, 7 de mayo de 2009

El caso del anillo de los filósofos


Quién puede salvar a lo mejor de la intelectualidad del mundo?

Es, evidentemente, una pregunta retórica. Todos sabemos que el único ser capaz de tamaña proeza es Sherlock Holmes. A partir de ésta premisa, Randal Collins, el autor de ésta novela, nos ofrece una trama que a mi, particularmente, siempre me ha gustado. Hay que decir, a fuer de honestos y éste blog pretende serlo, que no a todos los sherlockianos les parece buena. Ignoro porqué, pues por ella desfilan personajes reales de un peso notable en la historia de nuestro mundo y la amenaza que sobre ellos se cierne es tan ominosa y el misterio se desenvuelve tan desenvualtemente desde los claustros de cambridge hasta la abadía de Cefalú, en Sicilia, que personalmente no le pongo ningún pero. Lo hago constar para que lo sepan.

El autor es Mr. Randall Collins, que tenia que ser, forzosamente, Profesor de Filosofía. No le conozco otras obras de ficción, aunque el sostiene que ésta tampoco lo es y que el libro es fruto de sus propias deducciones mientras estaba estudiando algunos aspectos de las vidas de los más eminentes filósofos de la época...

Y bien, sea a través de algún misterioso conducto, sea fruto de una investigación personal o de algún legajo que permanezca todavía oculto en una caja del banco Cox & Cia.,no sé si estarrán de acuerdo conmigo, pero por mi, bienvenido sea cualquier otro relato de Sherlock Holmes!

La trama

La mayoría de cerebros privilegiados de Europa está cayendo bajo un influjo maligno. Son los años inciertos que precedieron a la Primera Guerra Mundial, unos tiempos en los que la magia y la ciencia se disputan el control de un nuevo mundo que apunta tímidamente tras los enormes logros tecnológicos que se van conociendo. Bertrand Russell es el encargado de comunicárselo a Holmes. Intuye que detrás de todo aquello se oculta el hombre más malvado de Inglaterra, Aleister Crowley.

Quién, sino Crowley, podría ser el culpable de la muerte del matemático hindú Srivana Ramanuján, el célebre protegido del profesor Hardy, otro reputado científico inglés? Quién podría conseguir que la mente brillante de Ludwig Wittgenstein se ofuscara totalmente?

Personajes com John Maynard Keynes, Annie Besant o el Reverendo Leadbetter,ocultistas ambos, desfilan a través de la peripecia investigadora del Maestro. Drogas, hipnotismo, fuerzas oscuras que acechan para penetrar en nuestro mundo, rituales satánicos y una tentadora oferta que le hacen a Holmes configuran un relato entretenido. No quisiera revelarles nada más del argumento, pero les sugiero que presten mucha atención al capítulo en el que Holmes y Watson deciden hacerle una visita a Crowley en el domicilio de éste. Brutal.

Añadir, si acaso, que éste libro se disfruta por él mismo pero, claro está, los numerosos guiños que hay referentes a los personajes reales que existieron y las referencias a sociedades como la de los "Doce Apóstoles" o a Lytton-Strachey y el Círculo de Bloomsbury, por ejemplo, se disfrutan más si uno sabe de qué van.

Ediciones

La mejor es, sin duda, la que Valdemar reeditó en la ya harto mencionada Archivos de Baker Street. Hay otra, anterior, de una editorial que no he conseguido averiguar pero la de Valdemar, además de la novela, añade como propina lo siguiente: nada más y nada menos que tres relatos cortos - Mi encuentro con Sherlock Holmes, La serpiente amaestrada de Whitechapel y El hombre de la barba azul marino - que son obra nada más y nada menos que del mismísimo Jardiel Poncela.

Aparte de que son desternillantes, cabe decir que Jardiel, que era un amante de Sherlock Holmes, quiso rendir a su manera un tributo al detective.

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